domingo, 12 de diciembre de 2010

Título.

Hace 11 años recibí mi título más importante; y distinto a todos los otros títulos que pudiera conseguir alguna vez a fuerza de estudio, entendimiento, disciplina, talento personal...etc; este me llegó sin que hubiera posibilidad anterior de demostrar ningún mérito.
Este título me lo regalaron. No hice nada para merecerlo, ni siquiera después de recibirlo estoy segura de poder responder a este regalo como debiera, pero lo asumo. Este título da respuesta de mí, de quien soy, de mi vocación-misión-identidad profunda.
Hoy hace 11 años recibí el título de manos de un ser por entonces pequeñito y frágil, y en el que hoy me reflejo en miradas, gestos, maneras de ser tan parecidas a mí.
Hoy hace 11 años, nacía Agustina, mi "mayorcita". 
Hoy hace 11 años que soy mamá.

Es un regalo de la vida por el que daré GRACIAS infinitamente!Es una buena razón para romper el silencio.


GRACIAS A LA VIDA QUE ME HA DADO TANTO!!!!

viernes, 3 de diciembre de 2010

TIEMPO DE SILENCIO

No creo que haya multitudes esperando que yo escriba, me da risa no más pensarlo...pero un amigo del otro lado del mar, me ha dicho a modo de "tierno llamado de atención" que no deje de escribir, que no sea egoísta, que no me "guarde". Nosotros somos amigos a través del puente que ha ido pintando nuestro encadenado de palabras, primero en el blog, más tarde fuera de él.. Más que palabras se han vuelto tantas veces: mirada, idea, ánimo para el camino, coraje, abrazo de paz. Nuestras palabras han ido borrando las fronteras entre su historia y la mía, entre su experiencia de camino y el mío,  entre su casa/su lugar/su Madrid y mi casa/mi lugar/mi Mar del Plata. Nuestras palabras son capaces de transitar la distancia entre el mar que nos separa, misteriosamente,  la misma distancia que cabe en un abrazo.
Nuestras palabras, simples, cotidianas -a veces especiales- me han hecho sentir muchas veces tan acompañada; y estoy agradecida por eso.

Todo este elogio de la palabra, para decir que justamente en este tiempo: necesito silencio. Siento una clara invitación a silenciarme un poco, a serenar mis ruidos, mis ideas, mis palabras. Estar en un lugar de calma para escuchar, para estar atenta, para recibir.
Justo ahora que la vida se va volviendo intensa y que me parecería como nunca antes que podría llenar mil páginas escribiendo, algo desde muy dentro reclama, insiste, pide: SILENCIO.



Seguimos caminando juntos, en esta parte del camino y por un rato, yo en silencio.
Hasta dentro de unos días.


miércoles, 3 de noviembre de 2010

Regalos de Octubre...

  1. mi amigo de este lado del mar (aunque sea un rato)
  2. cartas y dibujos de mis hijas
  3. una respuesta que esperaba
  4. la cercanía de alguien que acompaña
  5. una foto vieja que me sale al encuentro
  6. lucía
  7. vista de la playa 
  8. almuerzo especial con agus y cande
  9. confesión
  10. un secreto compartido
  11. una canción
  12. un llamado al teléfono
  13. el recuerdo de un "curso" especialísimo
  14. una buena amiga
  15. una sonrisa que ilumina
  16. escuchar
  17. algunos cambios
  18. paseos en bici
  19. silencios nutrientes
  20. una banderita de Filipinas
  21. Skype 
  22. reír con ganas
  23. unos mates compartidos
  24. un cumpleaños
  25. pintar
  26. Carmelo
  27. una canción en la guitarra
  28. la felicidad de unos amigos
  29. el sol
  30. una mirada de paz
  31. tantos gestos de cercanía y cuidado

viernes, 22 de octubre de 2010

Vocación de ternura...



Me regalás en oleada envolvente mil gestos de ternura.
A cada paso, en sorpresa, en gesto que no espero, que no pienso, que me deja poco menos que maravillada.
Tu mirada, en derroche de paz, me da descanso. 

.



Todas tus palabras se vuelven oportunas; tenés una manera tan delicada de decir que uno se siente abrazado en ellas, contenido y cuidado.
Tu corazón dispuesto, tan atento, tan infinitamente atento; en urgente movimiento se abre para recibir-me, sale al encuentro en un gesto apenas perceptible a veces, y sin embargo tan inmenso a la vez. 





Dentro mío algo pasa entonces que me vuelve vulnerable; me permito fragilidad, me acepto débil y necesitada de ternura. 
Puedo descansar el corazón en tu presencia y en tu abrazo. 
Puedo dejarme acompañar. 
Puedo bajar la guardia. 
Puedo no ofrecer resistencia.



Sigo sumando motivos para dar gracias! 



jueves, 14 de octubre de 2010

Campamento ESPERANZA

En campamento Esperanza...
...se va haciendo de día aunque por fuera sea noche todavía. La tierra misma, desde el fondo más profundo de su entraña, devuelve a la vida a quienes hace ya tanto tiempo permanecen a oscuras y aislados del mundo.
Contra todo pronóstico, en campamento Esperanza, nadie baja los brazos; no es momento de rendirse, de abandonar la lucha. Es tiempo de asirse con el alma entera a la vida, aunque sea desde la más débil esperanza de resurgir.
En campamento Esperanza, es vital estar unificado: corazón, deseos,confianza, esfuerzos, voluntad y espera. 
Tan vital como saber que otros fuera están compartiendo la misma lucha, incluso desde las limitaciones que imponen tiempos y recursos.
En campamento Esperanza el mundo entero ha puesto sus ojos estos días, será que tenemos delante una importante lección que aprender...

Celebro el exitoso rescate de los mineros de Chile; he visto salir a cada uno desde las imágenes que se mostraron al mundo en el día de ayer. 
Celebro la solidaridad, celebro la esperanza, celebro la vida, celebro el esfuerzo, celebro este final feliz. (de lo demás ya hablarán otros)

viernes, 8 de octubre de 2010

Millonarios y mendigos...

Somos ricos en aire, millonarios de aire para respirar; y sin embargo, bastaría que alguien nos privara de la mínima parte que nuestro cuerpo necesita para que estuviéramos en serios problemas.

Millonarios y mendigos a la vez.
Desbordados de tanto y tan necesitados al mismo tiempo.
Una imagen, un contraste claro, para poder contemplar en nuestra pequeñez y en nuestra fragilidad, la grandeza de Aquel que envuelve y sostiene cada parte de nuestro ser y nuestra vida.

Y rezamos así; sabiendo que Tata Dios se regala y derrama  sobre nosotros, en nosotros...y desde ese sentirse tan amado y cuidado y sostenido, uno puede animarse a entrar en esa dinámica de amor, diciendo "necesito", "gracias", "te alabo", "perdón". Mendigando lo que ya se nos ha regalado en abundancia.

Si respiro es porque el aire está ahí para mí desde antes. Si rezo es porque Él mismo está rezando en mí, siempre primero. Pura iniciativa suya, yo solo aceptando la invitación, dejándome envolver en el abrazo, recordando en cada Palabra y en cada palabra, una alianza de amor.


lunes, 20 de septiembre de 2010

"Que la VIDA no te pase de largo III"



Cada día de VIDA es una fiesta,
cada día un REGALO,
cada día una oportunidad de dar y recibir amor.

viernes, 17 de septiembre de 2010

Que la vida no te pase de largo II...


Ricardo es un salesiano de más de 70 años, y está pasando por una situación de enfermedad. El es una persona "viva" en todos los sentidos, su mente es ágil, abierta, flexible. Es un hombre activo, vital, inquieto, andariego. Ahora, está "obligado" al reposo, a estar dentro, a la quietud. Y desde ese lugar sigue siendo signo que nos dice "que la vida no te pase de largo", entendió qué es Vivir. Fuimos a visitarlo con mi hija Candela. Ella lo "extraña", hace meses que él no está en el patio de la escuela en medio de ellos, y ese estar especial se extraña. Candela me dice después de la visita: "Mamá soy feliz, nadie me borra esta sonrisa de la cara"; y ese ha sido regalo del Padre Ricardo para ella... y para mí, claro.



Te veo sonreír de una manera que ilumina. 
Podés sonreír en medio de la enfermedad, en medio de la limitación, con una sonrisa serena y verdadera. Y entonces te "creo" la vida. Soy testigo de tu ser paciente y sereno en medio de la cruz, y mientras te miro, digo por dentro: tu vida es creíble, más que nunca en esta hora. Toda tu vida es especialmente puesta en relieve en esta hora difícil. Vos sonreís y tu esperanza y tu alegría son auténticas, tanto que interpelan, que sacuden.
Y hay algo más: tu corazón es inmenso. Con que ternura te estás dejando cuidar, con que calidez nos recibís para hacernos compañía. 

Tengo que aprender tu paciencia, tu ternura, tu sonrisa, tu humildad para dejarte cuidar con tanta calma, con tanta paz. Tengo que "aprender" tu esperanza.


martes, 14 de septiembre de 2010

Que no se nos pase de largo...

"QUE LA VIDA NO TE PASE DE LARGO"

La hoja de Septiembre del almanaque que tengo en la oficina me regala en forma de advertencia o deseo esta frase. No le había prestado atención hasta ahora mismo, que me queda dando vueltas dentro como si quisiera abrirme los ojos a algo que se me está pasando inadvertido.
Septiembre es de este lado el mes de la Primavera, y la verdad es que la espero, en color, en perfumes, en aires más cálidos, en días más largos. Es mi estación favorita, aunque cada una tiene lo suyo. Es la que viene a recordarme que todo lo que ha ido gestándose callado y oculto empieza a encontrar un tiempo de despliegue, de abrirse, de brotar. Sí, la espero.

Mientras deliro en dos segundos todo esto, la frase vuelve a la cabeza..."que no te pase de largo"...

¿Y mientras ESPERO, será que algunas cosas se me van pasando de largo porque estoy distraída?
Y viene una pregunta a reforzar aquel primer mensaje:

"algo nuevo YA está brotando, ¿NO SE DAN CUENTA?"

Será un ejercicio para este tiempo; hacer más consciente en la espera, este darme cuenta de la vida que va siendo ya mismo, ahora, en medio de las cosas que vivo. Una espera que sabe que este es el tiempo. Con una esperanza que construye mientras espera.




martes, 31 de agosto de 2010

PoDríA SeR...

Podría ser que despedirnos,
y la sensación que inunda el corazón cuando sucede,
viniera a despertarnos en el camino,
viniera a recordarnos el comienzo
cuando llevados casi por inercia
andábamos desanimados y perdidos;
y al "despertar" ahora, uno se descubra 
tan lleno de corajes, con sueños renovados, 
con sentido.

Podría ser, me digo,
que haber quedado solo
tras haber disfrutado la experiencia 
de estar acompañado en el camino,
ayudara a afirmar el propio paso
a medir el límite, a asentar lo aprendido,
y renovar en lo más hondo los motivos.

Podría ser, que la nostalgia,
no sea más que una especial forma de cariño;
si recuerdo y sonrío,
si me siento feliz,
si bien dentro el corazón conserva
los gestos, las palabras, la vida acompañada...
en forma de latidos.

Podría ser, que entonces despedir-despedirnos,
nos regale crecer, no ponernos tan cómodos, no instalarnos, 
y recree por dentro un corazón mucho más agradecido.
Podría ser, nos impulse a un nuevo movimiento.

(Mientras tanto se gesta la ilusión del reencuentro.)


jueves, 19 de agosto de 2010

de despedida (uno más)...

Otra vez: despedir.
No aprendo, no me sale, me resisto...pero no hay más tiempo y es hora de despedir.
Cierro los ojos. 
Hacia adentro, en movimiento sincronizado, corazón y memoria me regalan un sinfín de imágenes y sentires que generan mucho más alegría que tristeza; mucho más deseo de agradecer que nostalgias.


Sos para mí bendición en el camino, que recibí sin buscar, sin merecer, sin pedir. Tan simple y tan maravilloso como que estabas ahí, en la más difícil encrucijada de camino, tan dispuesto a caminar cerca, a caminar conmigo, a acompañar el camino.
Me cuesta despedirte. Lo que lloro no es tristeza; se adelanta alguna sensación de ausencia, que se mezcla con el deseo de querer perpetuar en la memoria palabras sabias nacidas de un corazón que reza y que escucha. 

Ya sabés que en mí hay una siempre urgente necesidad de asir seguridades, y que estés cerca me aporta algo de eso. Ahora, más adentro, en lo hondo de mí, algo me susurra bajito: "no tengas miedo, todo va a estar bien". Y yo lo sé. 
Ahora es tiempo de esto. De despedirte bien. De desearte que el camino se abra para vos con sorpresa, con aires nuevos, con desafíos nuevos. Desearte que te vayas tranquilo, contento, dispuesto. Desear que tu corazón siga bien abierto para recibir, para acoger, para acompañar; y también para dejarse querer, para dar, para compartir. 
Y es tiempo también de agradecer todo el camino, todo lo que me trajo hasta acá; agradecer tus huellas a veces en forma de palabras, de consejo, de oído atento. Tus huellas en forma de pincelada, de música, de detalle. Tus huellas en tu manera tan abierta de compartirte, de "contar tu camino". 
Estos días fueron para mí un regalo inmensísimo, ¡el moño de tanto regalo recibido hasta ahora! (Cerúleo, Lorena Mc... y Vanina son testigos) y no voy a encerrarlos en palabras. 
Es tiempo de despedir. Dentro hay conmoción, no voy a esconderlo, es un signo más de cariño. 

La despedida entonces es un GRACIAS grande, como la distancia entre este lugar y tu nueva casa.
La despedida es un brindis que celebra todo lo compartido.
La despedida es mi bendición para el camino...


"El Señor te bendiga y te guarde; 
te muestre su faz y tenga misericordia de ti. 
Vuelva a ti su rostro y te conceda la paz
El Señor te bendiga, hermano Federico"


Que la tierra se vaya haciendo camino ante tus pasos.
Que el viento sople siempre a tu espalda.
Que el sol brille cálido en tu cara
Que la lluvia caiga suave sobre tus campos
Y hasta que volvamos a vernos.
Que Dios te guarde en la palma de su mano.



Buen y feliz viaje! Sigo sumando razones para ITALIA.








martes, 10 de agosto de 2010

Un canto para compartir...





Ando despacito
porque ya tuve prisa
y llevo esta sonrisa
porque ya lloré de más

Hoy me siento más fuerte,
más feliz quién sabe
y llevo la certeza
de que muy poco sé, o nada sé

Estribillo
             
Conocer las mañas y las mañanas,
un sabor de mazas y de manzana.         
Se precisa amor para poder latir,
se precisa paz para sonreír,
se precisa lluvia, para vivir

Siento que sentir la vida
sea simplemente
emprender la marcha
de ir tocando al frente

Como un viejo arriero va
llevando la manada
desandando días
por largos caminos voy, caminos hoy

Estribillo

Todo el mundo ama un día,
todo el mundo llora,
un día gente llega
y otros te abandonan

Cada uno busca
componer su historia
y cada ser en sí
cargará el don de ser capaz, y ser feliz

lunes, 2 de agosto de 2010

Corazón en la mano...


El corazón dice tantas cosas estos días que se me hace difícil ordenar las palabras.
Necesito escribir. Necesito decir. Necesito "ver" y "tocar" lo que se viene gestando invisible en lo profundo. Necesito dar a luz tanto sentir agradecido que el corazón palpita en este tiempo, darlo a  luz en palabras, hacer visible lo invisible.
No sé por donde empezar esta vez. 

Con el corazón en la mano, así empiezo. 
Tanto tiempo estuvo acorazado para no doler, para no sufrir, que ya había olvidado como era. Casi sin darme cuenta me ví expuesta, vulnerable, abierta; y en salto de coraje, que no ha sido del todo consciente, me descubrí dispuesta a compartir y confiar. Compartir de verdad, lo íntimo, lo más mío, lo propio. Y las defensas que antes me parecieron naturalmente necesarias, carecieron de sentido.
Pienso ahora en cuánto hubiera perdido si mi propio sentido de autoprotección, me hubiera mantenido a prudente distancia, en un vínculo que ha sido por lejos de los más sanantes que he vivido. 
La experiencia del "no cuidado" es preciosa. 
Sentirse tranquilo y querido como uno es. Y animarse a querer; que el otro sepa que es especial e importante para uno.
El Amor tiene maneras tan lindas de manifestarse...

Y el corazón en la mano también habla de confianza. 
Como cambia la mirada y el sentir en uno cuando hay unos ojos cerca que miran con confianza; cuando las palabras, los gestos y la fe de otro se hacen bálsamo para el propio corazón, y borran con mágica ternura las dudas, las culpas y los miedos.
La experiencia de la "confianza" es preciosa también.
Sentirse en confianza para ser uno, lo más uno mismo que se pueda.
El Amor tiene maneras tan misteriosas de hacerse ver...

Y el corazón en la mano necesita hablar del camino.
Encrucijadas del camino que cambian rumbos, que desdibujan presencias, y que regalan nuevos compañeros de ruta. Vueltas del camino que te mantienen, a la fuerza, abierto y expectante. Imposible dormirse. Pasos del camino que te sorprenden, te cuestionan, te movilizan... a veces sutilmente y a veces sin tanta sutileza. Del camino especialmente el corazón va dictando nombres, presencias concretas. Es regla (que necesito aprender) ser capaz de recibir y capaz de despedir. Con igual libertad, con igual alegría -aunque uno no quiera despedirse-; con inmensa gratitud por la posibilidad del recorrido juntos.
El Amor tiene maneras tan delicadamente providenciales de acompañar...

El corazón en la mano para ver y tocar, tanto signo desmedido de amor que le ha sido regalado gratuitamente.



miércoles, 21 de julio de 2010

Ausencia.

Se le ilumina la sonrisa apenas la ve llegar. 
Algo en él se vuelve radiante, y  derrocha sin pausas, sus ganas de contar todo lo que hizo en el tiempo que estuvieron separados.
Ve por sus ojos, le sonríe, la recorre en miradas como queriendo recuperar cada hora y minuto de ausencia.
Y ella, se deshace en ternura. Es delicada en el gesto, minuciosa en el cuidado, se detiene en el encuentro, cada tarde cuando viene a buscarlo a la Guardería.
Lo mira de una manera única, especial. 
No tiene apuro. Lo mira, le habla suave, lo envuelve en amor.

¿Podrá tanto amor vivido intensamente en 4 años alcanzarle a él para toda la vida?¿Cómo explicar que esta vez habrá que esperar para el encuentro, que esta ausencia será la más honda y profunda de su historia? ¿Cómo explicar que se le arrebata lo único que necesita para sonreír de esa manera? ¿Cómo decirle y que comprenda que esta vez ella no podrá cumplir con la promesa que le hizo hace unos días?

Un accidente inesperado. 
Una mamá que se apaga. 
Un hijo que la espera. 
Un médico que dice "no se puede hacer nada". 
Un vacío de esperanza. 
Un silencio que está lleno de preguntas. 
Y sí la fe, pero la tristeza es demasiada hoy



domingo, 11 de julio de 2010

de COMPAÑEROS de CAMINO...



(Podría escribir sus nombres esta vez, pero voy a hablar de ellos no hablando solo de ellos, y entonces prefiero guardar algo más que solo nombres. 

Sé que si pasaran por acá, podrían reconocerse entre mis letras, así que los nombro para adentro mientras pido a Tata Dios que los bendiga especialmente, y le doy gracias por tanto regalo de camino.)

Cuando la tristeza me ganaba el corazón, y mis pedidos de auxilio eran desesperados, cuando no podía mirar más allá de algún pozo, cuando solo podía apacentarse mi impaciencia con cariño...

Cuando alguna encrucijada del camino me acobardaba demasiado, y me hacía irremediablemente ir para atrás a riesgo de perderme, cuando no encontraba la salida y mi encierro solamente podía ser contrarrestado con confianza......

Cuando abulia y desgano eran fuertes potencias, cuando el sinsentido parecía el único sentido, cuando ese adormecerse frente a la vida solo podía ser despertado con ternura...

Cuando la desesperación y alguna bronca se hospedaban en mí, cuando el enojo me hacía fruncir ceño y corazón, cuando mi puro gesto de defensa necesitó ablandarse con escucha...

Cuando el dolor me traspasó la historia, cuando la noche parecía interminable, cuando el silencio de la no respuesta y la "injusticia" era tan insoportable que solo un abrazo sincero y cercano podía ser descanso...

Cuando la soledad se hizo temible, y parecía que ya no habría manera de volver a celebrar en el camino, cuando cada paso carecía de sentido a mis ojos, cuando no había manera de mirar más lejos a menos que alguien viniera a recordarme que era necesario levantar la mirada...

Cuando fue empezar de nuevo después de los fracasos, cuando necesité reconocerme nuevamente capaz para el camino, cuando la desconfianza hacia mí misma encontró algún eco cerca diciendo en convencido acto de fe "vos podés"...

Cuando mi imagen estaba tan distorsionada que ya no podía reconocerme a mí misma, cuando mi identidad era solo un listado de errores y debilidades personales, cuando no podía mirar a los ojos y era necesario un espejo verdadero que pudiera devolverme en reflejo también mis cosas valiosas...

Y también...

Cuando la alegría fue tanta que el corazón se me saltaba del pecho y necesitaba compartir, cuando hubo un otro cercano celebrando conmigo y uniéndose a mi fiesta...

Cuando el perdón se hizo regalo, cuando las defensas se fueron diluyendo y pude salir de mí misma a encontrarme con otros...

Cuando pude constatar la mirada de esperanza en la presencia inamovible de ese amigo, una paciencia y una confianza a prueba de todo...

Cuando la vida me sonríe y tengo ganas de cambiar el mundo empezando por mí...

Cuando los ojos miraron adelante con serena confianza y  escuché en claro aliento la voz cálida y única de quien me conoce, me cuida, y me quiere como soy...

Cuando soñé chiquito o cuando soñé a lo grande, y pude sentirme comprendida, acompañada, alentada ...

Cuando el silencio, cuando la canción, cuando la necesidad, cuando lo gratuito, cuando la alegría, cuando algún pesar, cuando el desafío, cuando el descanso, cuando la rutina, cuando la sorpresa, cuando la verdad, cuando lo secreto, cuando hubo rumbo, cuando todo fue confuso...


Ahí han estado SIEMPRE unos compañeros de camino tan maravillosamente valiosos que casi me parece mentira que pueda haber sido "merecedora inmerecidamente" de tanto, tanto, tanto REGALO.
Cuando pienso en estos compañeros de camino que se me ha regalado conocer y compartir; se me conmueve el corazón con una alegría tan inmensa que difícilmente podría decir en palabras. 
Si el corazón hablara, sé que solo podría repetir una y otra vez, GRACIAS..GRACIAS...GRACIAS!





sábado, 26 de junio de 2010

Un día como hoy...

... hace exactamente 9 años, haciendole honor absoluto a su nombre, 
nacía CANDELA.
(la más chiquita de la casa)


Y porque es para mí una de las dos razones más visibles para alimentar mi
ESPERANZA EN EL CAMINO,
le dedico esta entrada con todo el amor que puedo...


Y doy gracias a Dios por el regalo de la vida de mis hijas,
hoy especialmente por la vida de Cande, que nos trae sonrisas en derroche
y tanta luz a nuestra casa.

¡¡¡FELIZ CUMPLE CANDELITA!!!

CaNTaR

Cuando se silencian los ruidos, cuando se duerme la memoria y se serenan los proyectos,

cuando se debilitan los miedos, cuando la soledad no se vuelve temible,

cuando hay sueños nuevos, cuando se anima el encuentro,

el alma canta.

El alma en canto improvisado, con ritmo incierto, viene a sacarlo a uno de toda distracción.

El alma canta alegría, canta paz.

El alma canta en íntimo susurro, gracias, gracias, gracias.


El corazón parece palpitar a suave ritmo en pulsos traducibles: "todo está saliendo bien".
Y el alma canta. Es tiempo de confiar.

jueves, 17 de junio de 2010

...de PRESENCIA y DETALLE (desmedido)


¿Cómo se puede contar sin contar, algo que me resulta absolutamente especial y que podría "mal entenderse" si me voy en detalles?
Me pregunto eso, y me respondo: no habrá que contarlo.
Pero voy a tratar de ponerle palabras a lo otro, a lo que va por dentro de lo que podría ser solo anecdótico.
Algo que te resulta especial, un signo lindísimo de ese algo especial, llegás a compartirlo en diálogo con alguien. Y para propia sorpresa o no tanto, el otro te devuelve en espejo la misma apreciación; en simultánea sorpresa vive aquello casi de la misma manera que vos.

Haber compartido, y haber hecho concientes esos signos; ahora te vuelven la mirada atenta y el corazón expectante a la posibilidad de que se repitan.

Y entonces, pasa. En repetición exagerada y bella, en sorpresa impresionante, en lo inesperado, en lo que podría ser una tremenda “casualidad”...pasa. Y uno busca la mirada casi cómplice del otro, como diciendo “¿vos viste, no?”, tratando de confirmarse para adentro que no es una ilusión, que está pasando.

Y entonces otra vez, al día siguiente. Y uno se sonríe y lo disfruta en silencio.

Y al día siguiente, desbordando en el gesto…

Y al siguiente cuando la evidencia hace creer que esta vez no pasará…¡¡¡PASA!!! Sí, pasa. Cual milagro multiplicándose delante de los propios ojos, pasa.

Y uno ya no solo se sorprende y se sonríe, lo disfruta y agradece, sino que se descubre meneando la cabeza en silenciosas palabras, casi incrédulo, repitiendo “no era posible… no era posible…”

Y ahora la sonrisa se vuelve lágrima-emoción-desborde de un algo que no puede explicarse.




¡Hasta dónde, hasta cuándo, qué más nos hará falta para comprender!



lunes, 14 de junio de 2010

de la FeliciDaD...

En medio del camino, revisando los pasos, actualizando referencias en mis mapas en blanco, disfrutando del paisaje, reorientando la marcha, recordando el sentido...

En eso voy, cuando dentro una pregunta empieza a hacerse eco, despertandome de la rutina, e invitando una respuesta. Respuesta que no tiene sentido en sí misma, pero que me lleva a un lugar en donde facilmente descubro pistas y señales de cómo seguir hacia adelante, hacia adentro, hacia afuera...hacia...hacia...hacia...

¿Sos feliz? Sondeo en mis propias experiencias de gozo, de felicidad, de paz. Pocas veces como ahora me detengo en esto. Y la pregunta se abre con distintos matices de lo mismo. Hago memoria, tratando de detectar "esos" momentos, tratando de identificar sentimientos, personas, contextos...
Empiezo a hacer lista de dos o tres cosas, cuando me doy cuenta que no. No se trata de hechos sueltos más o menos importantes, no es ahí.
Hay experiencias de Gozo mayúsculo que a uno lo marcan con indeleble, y que se vuelven fuentes vitales en donde volver siempre que se quiera a buscar agua fresca. Oasis del camino. Remansos claros y serenos en donde fortalecerse para la marcha que continúa.

Y entonces lo encuentro. ESE lugar para mí, es y será por siempre, la experiencia de sentirme amada en todo lo que soy, así, con lo que tengo y con lo que me falta; con mis dones que son bastantes y con mis fragilidades que hacen un buen contrapeso a los primeros. Sentirme amada, invitada tan especialmente, perdonada, querida así... eso no tiene precio! Desborda porque no se mide por lo que merecemos, es tan desbordantemente gratis, que la alegría que surge de esa experiencia es serena e  inmensa.  La certeza de que los caminos nos esperan ahí delante aunque demos mil vueltas de más (¿?), y uno no va solo en esto.

Ahí se abre el camino que invita y cuestiona, que me hace "salir", que me pide respuesta. Una respuesta que se escribe con la vida misma, una respuesta que nadie más podrá decir por mí, al menos no en mi camino. Una respuesta que debe ser también para otros fuente-oasis-remanso de felicidad. Amor hecho respuesta en lo cotidiano, en las miradas, en los gestos, en las palabras, en la humilde mano que se tiende y no espera respuesta. Amor hecho concretez en la posibilidad de hacer sentir amado-valorado-tenido en cuenta a quien todavía no descubre en su vida esta maravilla.

Soy feliz, aún en medio de las dificultades que a veces no son pocas; con las cosas que todavía me inquietan, con las muchas cosas que quisiera cambiar empezando por mí, soy feliz.

miércoles, 9 de junio de 2010

De lo impredecible...

¿En qué lugar se alojan la mayor parte de mis miedos?
¿Cómo voy eligiendo mi manera de vivir?
¿Qué busco y desde dónde?
¿Cuáles son mis alegrías más profundas y cuáles mis preocupaciones?

Puedo seguir agregando preguntas, y todas terminan casi en un mismo lugar, en una misma fuente de respuesta: lo impredecible.
Ahí se responden mis miedos. Lo impredecible me asusta las más de las veces, me desconcierta no poder asir con fuerza seguridades en el camino, en las relaciones, en las situaciones cotidianas, en los proyectos, hasta en las ideas se me hace a veces imprescindible adivinar dónde terminarán.
¿Y mi manera de vivir? Es que me pregunto si en verdad confío en el camino que se abre, lleno de sorpresas y cosas que no se pueden predecir ni manejar. Porque si confío verdaderamente en que Dios me pondrá en el camino todo cuanto necesito, y en que todo está bien así, debería al fin abandonarme en sus manos igual que abandonar los pesares o preocupaciones que amenazan, a veces, quitarme la paz.

Preguntas en voz alta, nomás eso.



domingo, 30 de mayo de 2010

Buscando el tesoro con un mapa mudo...

Carta de viaje.
Estoy en el camino. Es tanto lo que ha ido cambiando desde el comienzo que por momentos ni siquiera me parece que se tratara del mismo viaje. Alguna foto del paisaje, algún recuerdo de lugar o personas, alguna vieja nostalgia, viene a decirme que sí, que es el mismo viaje,  yo no soy la misma ahora.
La mirada ha ido cambiando, acentuando algunas cosas que al principio no eran siquiera advertidas. Hay detalles que antes parecían fundamentales, que ahora son hasta innecesarios. Traigo quizás menos, o distintas inquietudes; quizás mayores cansancios. Me río de mí, de las cosas que me han quitando el sueño y el descanso en otro tiempo, me río a carcajadas de mí misma. Eso voy aprendiendo mientras ando. ¡qué dramáticas me han parecido a veces algunas cosas!
Alguien me dio un regalo al principio de una etapa importante de camino: un mapa que debería abrir cuando llegara el momento. Yo sabría distinguir ese tiempo. Un mapa del tesoro en manos de alguien que busca es casi como tener el tesoro mismo en la mano.
Hoy fue el día. No es broma, pero el mapa para sorpresa mía estaba en blanco.
¿¡Un mapa en blanco va a llevarme a donde debo llegar!?  No es posible, pensé. No es posible. No es posible. No es posible. No es posible.
Un mapa del tesoro, en BLANCO.
Entre confundida, asombrada, divertida, repetí la escena de reírme a carcajadas.
De pronto, parece que entiendo, de pronto otra vez miro atónita un mapa que no va revelarme ninguna respuesta, y otra vez parece que entiendo.
Hay que seguir caminando. Tengo en mano un mapa en blanco y así y todo, con él he ganado la certeza de que hay un lugar ahí fuera esperando por mí a ser descubierto.
Otra vez en movimiento.
"Los mapas mudos son aquellos que no dan ninguna información acerca del lugar que representa el mapa (por lo general suelen estar en blanco). Se suelen usar para el aprendizaje con fin de ubicar los distintos elementos geográficos que se estén aprendiendo o crear un nuevo mapa con diferentes referencias"

Cambiar las referencias. Aprender. Crear un nuevo mapa...
.
.
¿Y si en lugar de preguntarnos "dónde está el tesoro" empezáramos a mirar el corazón y adivinar los deseos profundos que guarda?

¿Y si en lugar de seguir arriesgando respuestas inmediatas, casi urgentes, a preguntas y caminos que todavía se están abriendo inciertos e impredecibles para adelante, nos animaramos a la espera en movimiento de caminante, sabiendo que algo está pasando mientras tanto, aunque no lo notemos?

¿Y si cambiaramos certeza por confianza?

¿Y si entregados al presente, pudieramos descansar de los recuerdos que aplastan y de los planes que alimentan ansiedades y dudas?

¿Y si soltaramos de una vez nuestros proyectos, y abrieramos corazón y mente para percibirnos como parte de un plan mayor al que se nos convoca e invita?

¿Y si se nos arrebataran de un solo movimiento todas las seguridades que hemos ido construyendo, para que experimentemos en forma magistral, que nada de lo que nos parezca "conseguido-ganado-merecido" es "triunfo-ganancia-mérito propio"; y que aún así todo cuanto hemos recorrido, entregado, y vivido en el camino tiene sentido?

"Donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón"

Que el corazón nos guíe...

sábado, 15 de mayo de 2010

De la PERMEABILIDAD del CorAzóN...

"Para ser permeable, un material debe ser poroso, es decir, debe contener espacios vacíos o poros que le permitan absorber fluido. A su vez, tales espacios deben estar interconectados para que el fluido disponga de caminos para pasar a través del material..."

Trato de conectar con lo que pasa por dentro y de poner en una palabra lo que el corazón dicta. Es un "ejercicio" que me regalaron en un retiro del año pasado, y más de una vez me encuentro durante la semana buscando esa palabra que me "expresa", que me define de alguna manera en ese momento concreto.
A veces es tristeza, a veces ansiedad, o búsqueda, o alegría, compañía, bien, paz, incertidumbre, pena...
Hace días que vengo dándole vueltas en la cabeza (para que ojalá en algún momento baje plenamente al corazón y pueda vivirlo así) al tema apego/desprendimiento. Le doy vueltas con preguntas, con imagenes, con recuerdos, con nostalgia a veces; con la verdadera intención de aprender el arte de vivir los vínculos con intensidad que se entrega y con libertad que no aferra.
No es casual que esto surja con fuerza desde dentro, a las puertas de otra despedida. De algo que no querría "soltar" ahora, de alguien que no quisiera despedir todavía.
Y siento pena; a la vez que intento convencerme desde el pensamiento por lo menos, de que todo cuánto esta persona concreta y los espacios y tiempos compartidos me trajeron de regalo inesperado me hicieron estar hoy en donde estoy; me devolvieron la posibilidad de sonreír, me ayudaron a sanar el alma de heridas hondas, me despertaron nuevas ganas de soñar. Nada de eso lo buscaba, y todo eso me fue dado.
Ahora hay algo en mí, que desearía atesorar lo que no me pertenece, lo que debe seguir su curso. Sé que no es bueno, pero es la verdad que me atraviesa hoy.
Y es en donde se me cruza la imagen de un corazón permeable.
Un corazón bien dispuesto para "dejar entrar", para dar permiso a que fluyan por dentro personas y experiencias, encuentros, vínculos, confianzas; para aceptar que entren sin urgencia de controlarlo todo yo...nuevas maneras de encontrarse, rostros nuevos, otras relaciones.
Un corazón permeable en el que hay espacios vacíos a la espera de lo que está por "entrar". Un corazón poroso por el que puedan transitar con libertad: sentimientos, verdades que empiezan a develarse, razones que ganan fuerza, corajes que al fin deciden alzar la voz, movimientos lindísimos que me hacen latir por dentro con más vida. Corazón poroso que abre "caminos para pasar a través de"; corazón que invita decididamente a la fluidez. Corazón que celebra la inmensa bendición de recibir en gestos de cuidado, de ternura, de misericoria, de consejo, de escucha, el regalo preciosísimo de la PAZ.
Un corazón permeable, abierto también para dejar partir, para dejarse "vaciar", para volver a dar lugar a la novedad.





 

domingo, 9 de mayo de 2010

del CaMinO...

"Del cerro vengo bajando,
Camino y piedra..."

Sin pausa, sin tregua, sin descanso, el camino sigue trayendo sus regalos. Me siento casi como un niño caminando y sorprendiéndose cada tres pasos con algo nuevo que colma expectativas o ideas que hubiera podido adelantar.
LLevo la mirada en alto, al frente, buscando. Y a la vez que la mirada quiere adelantarse, el corazón viene apaciguado disfrutando del paisaje que es así: puro regalo.
Alguna señal de alerta me dice por lo bajo "no te apegues". Disfrutar del camino gratuitamente implica necesariamente no quedarse instalado, no querer apropiarse. Si tanto deseo apropiarme de este paisaje, de este paso, de este instante, de estas compañías/regalo en el camino, probablemente el andar se congele y me pierda el camino abierto que es siempre promesa para adelante.
Caminar peregrino, liviano de equipaje. Con capacidad de acoger y despedir, abrazar y desprender, recibir y dar, anidar y soltar, dejar entrar y dejar salir, llenar y vaciar...dinámica que el corazón va ejercitando de a poco.
Desdibujar nostalgias y penas especiales, para cantar con corazón agradecido, por cada cosa que en el camino va siendo sorpresa desmedida y regalo inmerecido.
Empiezo a intuír de que se trata vivir en estado de gratuidad.


"Es mi destino
Piedra y camino...
De un sueño lejano y bello, viday
Soy peregrino..."

domingo, 25 de abril de 2010

Cuando Dios borra...

...señal que va a escribir.-



Por alguna razón este tiempo se me volvió "tiempo de balance". No sé de dónde me viene esto, no es algo que me haya propuesto especialmente, pero de pronto me descubro haciendo memoria de mi historia, prestando atención a los acontecimientos personales, a los sentires, a algunos pasos dados.
En medio de estos pensamientos y recuerdos, esta frase-título de post me vino a la cabeza y provocó una sonrisa que asiente desde dentro reconociendo en las palabras una verdad.
Voy haciendo esta experiencia. Vaciarse se vuelve condición para hacer lugar dentro para cosas nuevas; desnudarse para ser más sensible a la novedad; despojarse para ser más libre en el andar; "borrar"-vaciarse-anonadarse, para que en uno se vaya gestando vida nueva y llena de sentido.

Tantas cosas, en la historia personal, eran inconcebibles en algún momento pensarlas "distinto", había cosas que nos estaban tan "seguras", tan firmes. Personas, vínculos, afectos que prometían ser tan infinitos, tan irrompibles, y no fueron. Personas que ya no están. Personas para las que uno mismo ya no "está". Vínculos que fueron importantes en un momento y hoy son solo un recuerdo. Lugares que sentíamos casi como parte extensiva de nuestro propio ser, y hoy son solo paisajes del pasado, que tienen sentido solo en eso, en ser parte del camino pero sin apegos especiales ahora. Preguntas que necesitaban respuestas inmediatas y concretas, hoy vueltas espacios de búsqueda nuevos y profundos. Rostros nuevos. Presencias nuevas. Espacios nuevos. Maneras distintas de vincularse. Heridas sanadas. Sueños renovados. Mirada atenta, expectante. Deseos despiertos, corazón en movimiento. Pies en el camino listos para seguir andando.

Mirar atrás lejos de ser un signo de nostalgia se me vuelve ahora mismo razón para dar gracias: en todo cuánto Dios ha borrado, en todo lo que ha sido para mí invitación a vaciar-soltar-desnudar; no puedo más que ver señales de vida y amor.
Leer en todo lo vivido, ahora todo junto, lo que Tata Dios va escribiendo me inunda de alegría. Casi puedo decir como los dos que iban camino a Emaús "¿no ardía acaso nuestro corazón mientras íbamos en el camino?".
Es tiempo de agradecer.
El balance inclina mi balanza hacia un solo lado, el Amor pesa; no hay manera posible de salir perdiendo.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Cantamos porque el grito no es bastante!!!






No muchas palabras. Hoy el recuerdo, en una canción de Benedetti cantada por Baglietto.
El recuerdo de tantas ausencias; el dolor silencioso y profundo que conocí en los ojos de mis abuelos ante la desaparición de un hijo. El silencio de papá por un hermano del que nunca supo nada más.
Hoy el recuerdo por tantos, porque no hay familia en mi país que no haya sentido muy cerca el dolor que dejó semejante golpe y atropello a la VIDA y a la dignidad de las personas.
Hacer memoria para que esto no suceda NUNCA MÁS.


24 de marzo - Dia de la MEMORIA por la verdad y la justicia

lunes, 22 de marzo de 2010

PasOs NueVoS...


NO SE ACUERDEN DE LAS COSAS PASADAS,
NO PIENSEN EN LAS COSAS ANTIGUAS;
YO ESTOY POR HACER ALGO NUEVO: YA ESTÁ GERMINANDO,
¿NO SE DAN CUENTA?

SÍ, PONDRÉ UN CAMINO EN EL DESIERTO Y RÍOS EN LA ESTEPA...

(de Isaías)

viernes, 19 de marzo de 2010

SIEMPRE AMANECE...


Siempre amanece.
A veces necesitamos que amanezca más pronto, no nos gusta la espesura de una noche que se proyecta infinita e insoportable.
Tenemos miedo de estar solos. La oscuridad se nos vuelve prisión que nos encierra hacia adentro.
La desconfianza se vuelve compañera, y todo es amenaza en la fragilidad de nuestro desconcierto.
Aterra cualquier cosa que venga de afuera. Llenamos de cerrojos y corazas el corazón y el alma, aún a sabiendas de que nada en el mundo podría herirnos, ya, más. Y el encierro inevitablemente agudiza dolores, frustraciones, y errores.
La noche nos anula en un comienzo. Nos desespera NO ver, no saber, no encontrar; nos duele en el alma no dar con las respuestas, que no sean atendidos los reclamos, que quien esperamos que venga en nuestra ayuda...no se entere. 
Sé de noches profundas y oscuras ¿Como te digo ahora y que me creas, que en un tiempo AMANECE?
Y más aún, ¿Cómo te digo, y que me creas, que la noche tiene en sí misma, en medio de ella, en lo más hondo y profundo de su esencia, valor y sentido?
La noche me despojó de TODO. Mi noche más oscura arrasó con todas mis seguridades, mis cosas conocidas, lo que me era tan sencillo "manejar". Mi noche más profunda, abrió en mí una capacidad de mirar distinta, no hay mérito alguno de mi parte, he aprendido a mirar a fuerza de que se me quite lo inmediato y la luz. La noche más honda de mi vida, me hizo entrar en una intimidad conmigo misma como nunca antes había experimentado, animarme a mirarme en detalle -mis miedos, mis fragilidades, mis inseguridades, mis verguenzas-. La noche más negra de mi historia fue directa invitación a sentirme profundamente acompañada por los más verdaderos amigos que alguien pudiera encontrar.
La noche más negra, más triste, más desconcertante, me hizo valorar como nunca antes la luz y la esperanza. Aprender a esperar, eso me dio la noche. Aprender a confiar en Quien hace buenas todas las cosas (Si hasta la noche fue buena el día que se hizo uno de nosotros)
Siempre amanece. 
Y no puede apurarse aquello que viene con su propio ritmo, y sus tiempos. Hay que ganar paciencia para entonces, y animarse a esperar. Alguien cerca seguro que viene a recordarnos que no estamos solos. Es tiempo de sostenerse. Estoy cerca, por si acaso...

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...