miércoles, 25 de mayo de 2011

Estado...

Me cambian los paisajes y ya no sé quien soy.
Me impregna el corazón un miedo que no quiero, pero que de ningún modo responde a mi voluntad de sacarlo de adentro. Bien sé ya que corazón y cabeza, en mí, están divorciados de hace rato; y tal parece que en malos términos.
No me acostumbro. La sorpresa me lleva a un borde que no quiero...
Necesito silencio, verdad, refugio.
¿Qué es escape? ¿De qué manera sabré si voy atenta a lo que anhelo? ¿Dónde es verdad la verdad que busco?
Algo desde adentro se transforma en lágrima, y yo que me sé no triste esta vez, no sé ponerle nombre a lo que pasa.
Será paciencia lo que deberé pedir para mí misma.
Pasos en falso... ¿falsos los pasos o la tierra que piso?
Lucidez, te necesito.


6 comentarios:

Angelo dijo...

Guauuuu. menudo pensamiento y reflexión. Me identifico a veces con todo lo que has plasmado en tan bellas palabras.
¡Me ha encantado! Un saludo

J@ckie dijo...

MI QUERIDA AMIGA!!!..EN UN MOMENTO DE MI VIDA ME MIRE AL ESPEJO Y NO SUPE RECONOCER QUIEN ERA... MUCHAS VECES TAMBIEN NESECITADA DE SILENCIO Y REFUGIO PEDI A DIOS QUE ME DEVOLVIERA MI LUCIDEZ...MUY BUENA TU ENTRADA. ME HAZ PUESTO A PENSAR...BENDICIONES!!

Analía dijo...

Angelo, Jackie...
Gracias por pasar y leer, y por animarse a compartir sus propios "ecos".
Un abrazo y bendiciones...

aLICIA dijo...

Podría ser que estás creciendo...y está muy bien pedir paciencia, lucidez, y no desesperarse amiga!
No te tortures pensando tanto: sos amor, sos gracia, son un don para nosotros! MUY FELIZ CUMPLEAÑOS!!!!

Salvador Pérez Alayón dijo...

Hola Analía, he llegado hasta aquí a través de Gabriel, y husmeando en sus enlaces. Y he quedado gratamente sorprendido del hallazgo.

Porque esas reflexiones son las que ayudan a crecer, a interiorizar, a madurar tu fe e inquietudes.

La voz de nuestro PADRE DIOS está dentro de nosotros. Es nuestra conciencia (Punto 1706 del Catecismo de la Iglesia Católica), y, cuando nos abandonamos a ella, escuchamos la voz de DIOS. Por eso, al cumplirla nos sentimos en paz y dormimos a piernas sueltas.

Al contrario, cuando no la seguimos estamos desesperados y angustiados. No nos sentimos bien.

Ocurre que muchas veces pensamos y opinamos de forma diferente a lo que nos dicta nuestra conciencia. Ahí está la Voz de nuestro PADRE DIOS que nos avisa, y el ESPÍRITU SANTO que nos alumbra y nos dirige en el camino.

"No tengamos miedo", como nuestro querido Papa, Juan Pablo II, nos decía. DIOS nos habla en nuestra conciencia y directo a nuestro corazón.

Gracias por estar ahí, posiblemente sea lo que DIOS te pide, ¿coincide con tu conciencia?

Un fuerte abrazo en XTO.JESÚS.

SÍ: ES POSIBLE dijo...

Quizás la respuesta esté cerca. Acaso necesitas un poco de silencio interior...

No dejes de buscar.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...